Una huella dejada en un paquete de galletas desencadenó la detención de un hombre, acusado de atacar con bombas de humo a supermercados chinos de la ciudad de Buenos Aires.

El sospechoso tiene 21 años y trabajaba como repositor en un supermercado, mientras que, a la vez, habría sido el autor de los ataques denunciados en otros comercios de los barrios de San Cristóbal y Parque Patricios. En todos se empleaban granadas de humo.

La investigación comenzó en agosto luego de que se denunciara el incendio en un supermercado. La Policía secuestró el artefacto y se llevó las filmaciones de las cámaras de seguridad de la entrada y de los pasillos.

El análisis de esas imágenes permitió trazar patrones sobre el atacante, que todas las veces utilizaba un casco de motociclista y, antes de dejar la granada, tomó contacto con otros objetos, como por ejemplo un paquete de galletitas. 

Su peritaje permitió la obtención de unas huellas digitales aptas para identificar al sospechoso. En un allanamiento en su domicilio secuestraron una granada de mano de humo, dos pendrives, tres teléfonos celulares, una notebook y un pasaporte de la República de China.